Nuestro mango

Los mangos son los frutos de un árbol también llamado mango (Mangifera Indica), perteneciente a la familia de las anacardiáceas. Con troncos firmes y hojas lanceoladas, en época de floración tienen flores pequeñas de color amarillo o rojizo. Los frutos del mango son ovalados, con piel gruesa y resistente (no comestible), de colores rojizos, amarillos y verdes, según la variedad.

El fruto tiene un hueso en el interior, de tamaño variable, y la carne es muy jugosa y dulce, con profundo aroma y estupendo sabor.

Los mangos están más sabrosos cuando son recogidos en su punto óptimo de maduración, ya casi maduros. Sin embargo, la mayoría de los mangos que llegan desde el exterior de Europa son recogidos cuando están verdes y enviados en barco/avión a su destino, madurando por el camino o en cámaras frigoríficas.

El mango cultivado en el Sur de España tiene todas las características propias de este fruto, destacando su inconfundible aroma y su pulpa jugosa y refrescante, con un sabor único, sin presencia de hilos/fibras. Sus colores son vivos y brillantes, en tonos rojizos, amarillentos o verdes. Las calidades que se cultivan en la Axarquía son principalmente las siguientes: Osteen, Kent, Tommy Atkins, Keitt y Palme Rojo.

El sabor de nuestro mango español es inconfundible, único y especialmente aromático, al ser recogido en su punto óptimo de maduración y no tener que sufrir grandes travesías ni semanas de almacenaje en cámaras de refrigeración. Producto natural 100 %, podrá degustarlo en su mejor momento cuando la piel sea flexible al tacto, pero sin chafarse, con la presión de los dedos.

La recolección del mango es manual, realizada con gran esmero y dedicación para que llegue a su casa en las mejores condiciones, con toda la luz y el sabor exótico y natural de una de las mejores frutas que podrá encontrar, cultivado en la Axarquía, Costa Subtropical del Sur de España, tierra de sol y de alegría.